Destino cíclico

Salud por aquello que conmueve, que desajusta, que hasta incomoda…
pero luego nos hace renacer.

Se presta para múltiples interpretaciones, de hecho las hay,
pues lo más complejo de aquello por lo que brindo es su naturaleza cambiante, granulada y dispersa.

Son como cosquillas… muero y renazco un poquito todos los días.

A veces, en días cansados como hoy, busco algo que me ancle a la tierra
y me muevo, aprovecho cada segundo, escucho cada una de las historias…
contrasto realidades, busco en el afuera mas diverso…

Pero finalmente, me dejo caer boca arriba, miro el cielo,
le estrecho mis manos, en espera de que vengan esas aves gigantescas que tengo,
y me hagan volar nuevamente.

Y ese mismo cuestionamiento, esa misma necesidad de aterrizaje, me conmueve…
para pronto volver a renacer.

Sutilmente a Susana, de Tanguito

Música repetitiva

Se han dado cuenta que cuando uno escribe algo, siempre antes de explicar lo que uno quiere escribir , antes y para que un lector lo entienda, debe detenerse un momento para contextualizar el comentario, parar en la escena que inspiró la descripción, la referencia, lo que produjo aquello que produjo…el hecho en concreto.
Pero quizás no es lo importante, no más que lo que provoca, por ello, escribiré desde ahora en el nivel de las producciones y no bajaré más a las cosas….sospecho que es a este nuevo nivel, el de las descripciones, en el que se da la secuencia infinita, lo que permite predecir y anticipar.
Es como cierta vez me dijeron: existen dos tipos de televidentes de teleserie, los ingenuos, pero con mas fortuna en este caso, que disfrutan de la trama y los otros que ya descubrieron que la historia no es nueva, que se adorna y llena de detalles, pero los acontecimientos, los personajes siempre han existido, y siempre seguirán con su patrón…
Hay sonidos tan suaves y repetitivos…que son como que te dieran un masaje y te relajan….como la siguiente canción:

http://www.youtube.com/watch?v=zFQ1B9KHW6s&feature=related

Matrimonio y dualismo cartesiano

¿Se han fijado que uno siempre lo piensa todo?
Y cuando a uno le pasan cosas que estaban fuera de lo planeado, cosas que hacen que el corazón empiece a funcionar…
Entonces como que salen rayos de energía desde el esternón hacia la periferia….y lo único que uno quiere es vivenciarlo a concho, pero los hechos y la razón te lo prohíben…
El juicio social, el ego….
¿Pero qué tanto cariño le tenemos a nuestras emociones? Aunque no queramos a veces hay que ignorarlas… hay que seguir adelante y hacer como si no nos importaran… y funcionar y gastar mucha energía en apocar una parte de uno, y nos fragmentamos.
Y si me justifico creando una nueva “cosmovisión del amor” y respeto las energías que emanan de uno, siendo honesta con uno independiente de las consecuencias… ¿qué pasaría?
Quedaría como una estúpida, porque hace ya bastante tiempo se definió la eterna lucha, entre la “razón y la pasión”.

Tortuoso camino del autodescubrimiento.

Si partimos de la base de que “entre más sé de algo menos lo conozco”, es decir entre más quiero acercarme a un objeto de interés, más rugoso se va tornando… ¿qué pasa con el autoconocimiento?
Cada vez que uno identifica más propiedades de alguna cosa, cada uno de esos aspectos, recién enlazados al primero, está relacionado con otros más, creando desde la imagen de un simple punto, varios vectores emergentes de distintas líneas, todas originadas desde el primer punto. Se convierte en una nueva realidad compleja… ¿pero disminuye nuestra posibilidad de abordarla?
En el caso de uno frente a la vida, cuando nos vemos en situaciones nuevas, y evaluamos y juzgamos la reacción que uno presenta frente a las mismas, va abriendo nuevas puertas y asignando nuevos significados a lo que “uno es”… a veces uno mismo se sorprende y redescubre. Pero, qué efecto tiene ese nuevo descubrimiento en nosotros, podemos vivir con esa emergente verdad, asumirnos a nosotros mismos actuando como lo hicimos o lo hacemos frente a ese nuevo dilema. Sospecho que eso puede ser para algunas personas algo aterrador. Por ello existen ideas y instituciones que cumplen el rol de disminuir estas incertidumbres, otorgando marcos referenciales de cómo actuar, alguien ya lo pensó y descubrió qué era lo correcto, por eso para qué desviarse, lo ya establecido tiene razón de ser, o nos conviene creer en eso, y no sumergirse en abismos internos que no nos llevan a ningún fruto externamente apreciable.

Ultimas reflexiones

Siento que a pesar de todo,
La vida está llena de magia.
De pequeñas sensaciones,
Pequeños trazos de colores tiñendo lentos una tela blanca,
Como sinapsis pequeñitas, lluvias de ideas...
caras nuevas, nuevos lugares y rutinas,
Siento que ese gran conjunto va trazando los caminos… nuevos caminos.
Y aunque se contemplen de fuera, sé que se viven por dentro
Y pueden desvanecerse y reconstruirse,
Es sólo cosa de actitud, lo importante es no abandonar nuestra esencia.

Polilla Kamikaze

Hoy me estaba esperando en la cortina de la ducha una Polilla Kamikaze…
Como si hubiese estado por horas, se dirigió a mí y me atacó con entusiasmo.
Yo la miré con cierto desconcierto...
Y no sé porqué, pero me sentí identificada con ella.
Con ganas de abrazar la vida con valentía y olvidar de pronto la mínima influencia en el entorno, la pequeñez…los miles de sucesos.

Recordé un estudio en monos (pobres...) en donde concluían que el estrés por tiempos prolongados causa depresión.
Los monitos evitaban descargas eléctricas necesarias para obtener su alimento, dejándose acaecer por el hambre…

Tal vez la sumatoria de emociones fuertes, y la excesiva y apreciada sensación de estar viva, provoque el efecto de Polilla Kamikaze…
Antecedido por un rayo de luz, como un ojo del huracán, en donde uno, en no muy plenas condiciones emocionales, comprende el actuar de algunos seres que antes no comprendía…
Y se “entrega” simplemente al sentir, quedando dos opciones…
Lanzarse en un vuelo sin destino, o escribir respecto el periodo previo y seguir dilatándolo.

Presente

Hoy me vine a “hipiiar” al Mahuida.
Traje todo lo necesario: Música, libro, agua y bloqueador.
También las ganas de disfrutar la soledad, y la certeza de que somos libres y podemos construir el tipo de vida que queramos. Pensando en las situaciones y sueños que quiero alcanzar pensando en ellos, llegué a la conclusión que no espero mucho de una relación. Sólo que en días como éstos, pueda llamar a alguien y me diga “voy para allá”…Entonces, poder compartir con él estos sentimientos, y él conmigo tantos otros…que celebremos juntos el estar vivos.
El problema es que luego de eso debe ser difícil no querer repetir el ciclo eternamente…
Sí, es oficial, tengo problemas para vivir el presente, por eso no te llamo.